Un tweet de Charles Arthur y la respuesta de Jeff Jarvis dan lugar a un debate tan interesante como antiguo: el equilibrio entre la necesidad de la publicidad en medios online y la privacidad de los usuarios.
Yo fui/espero volver a ser desarollador independiente para iOS. Mis aplicaciones son modestas, orientadas a aspectos muy concretos de productividad. Solo una de ellas tuvo un éxito modesto en USA.
Seguirle el ritmo a Apple siendo desarrollador independiente es muy difícil. Todos los años te tienes que actualizar en lo que se refiere al developer kit, tienes que seguir los giros en tendencias de estilo, adaptarte a los nuevos dispositivos/cambios de pantalla, mantener el alto estándar de atención al cliente de la compañía… eso aparte de actualizar la aplicación periódicamente y añadirle nuevas cosas. Es decir, un montón de horas de trabajo.
He probado el modelo freemium, el modelo aplciación gratis/aplicación de pago, el modelo con publicidad. Y bajo todas esas circunstancias mi conclusión es la misma: la filosofía del «todo gratis» y la percepción de que todas las aplicaciones deberían costar 0.99€ nos hace particular daño a los desarrolladores «indie».
Las personas que piensan esto deberían ser conscientes de cómo funcionan los números en el ecosistema de las aplicaciones móviles. Si haces un juego generalista que todo el mundo se va a bajar, seguramente puedes obtener beneficios a golpe de publicidad o con un precio de 0.99€. Pero si haces aplicaciones que cubren nichos muy concretos, que le va a resolver la papeleta a un grupo reducido de usuarios (reducidos respecto a todos los usuarios de iOS), esos usuarios deberían entender que el precio sea mayor. Cuando no lo entienden y te escriben, como me pasó a mi, para que bajes el precio, se arriesgan a una discontinuidad del servicio o la aplicación que están usando.
Todo esto viene a que, lo crean los usuarios o no, la gente que está detrás de los servicios y de las aplicaciones también son personas con unas facturas que pagar. Los usuarios deberían ser conscientes del «coste de oportunidad» (ese dinero que pierdes por estar haciendo una cosa y no otra). Cuando un servicio cierra porque ese coste de oportunidad supera a los beneficios (y te buscas otro trabajo) debido a que la gente no quiere pagar aquello, no deberían sorprenderse del cierre.
Pero lo que me parece más sangrante es que, personas que disfrutan de un servicio que les es enormemente beneficioso (por ejemplo las búsquedas en Google), se rasguen las vestiduras cuando ese servicio intenta hacer dinero de alguna forma para la que (probablemente) tu les hayas dado permiso haciendo click en «I Agree» cuando te presentan los términos de uso. Yo siempre invito a todas estas personas a que no usen esos servicios y que se vuelvan a los métodos tradicionales (las bibliotecas siguen ahí para consultar).
Quizá ayudaría a la gente saber que a las compañias como Amazon, Google, Netflix, etc. no les importa en absoluto que tu seas pepito o juanito y tus circunstancias concretas. La verdad es que para ellos somo un número más en una matriz enooorme que sirve para encajarnos en un grupo de personas con preferencias similares a las que venderles algo.
penjutodice
Buenas Emilio.
Sobre la publicidad en medios es un tema complejo. Yo desde hace muchos años utilizo extensiones de bloqueo de publicidad y de cookies de seguimiento por el hartazgo de muchas webs que saturaron visualmente sus contenidos con banners.
En cuanto a los podcasts, sigo bastantes podcasts americanos y cuando escuchas la información del patrocinador te la tomas como tal, como un anuncio y no como una recomendación real de un producto que vende el podcaster de manera convencida. Con los blogs y los posts patrocinados pasa lo mismo. Por esto, me compré el altavoz xiaomi que recomendaste y no se si lo haría en caso de que fuese un «anuncio».
Espero que mi comentario te sirva como muestra.
Un abrazo.
Juan Luis Herrera Cortijo dice
Yo fui/espero volver a ser desarollador independiente para iOS. Mis aplicaciones son modestas, orientadas a aspectos muy concretos de productividad. Solo una de ellas tuvo un éxito modesto en USA.
Seguirle el ritmo a Apple siendo desarrollador independiente es muy difícil. Todos los años te tienes que actualizar en lo que se refiere al developer kit, tienes que seguir los giros en tendencias de estilo, adaptarte a los nuevos dispositivos/cambios de pantalla, mantener el alto estándar de atención al cliente de la compañía… eso aparte de actualizar la aplicación periódicamente y añadirle nuevas cosas. Es decir, un montón de horas de trabajo.
He probado el modelo freemium, el modelo aplciación gratis/aplicación de pago, el modelo con publicidad. Y bajo todas esas circunstancias mi conclusión es la misma: la filosofía del «todo gratis» y la percepción de que todas las aplicaciones deberían costar 0.99€ nos hace particular daño a los desarrolladores «indie».
Las personas que piensan esto deberían ser conscientes de cómo funcionan los números en el ecosistema de las aplicaciones móviles. Si haces un juego generalista que todo el mundo se va a bajar, seguramente puedes obtener beneficios a golpe de publicidad o con un precio de 0.99€. Pero si haces aplicaciones que cubren nichos muy concretos, que le va a resolver la papeleta a un grupo reducido de usuarios (reducidos respecto a todos los usuarios de iOS), esos usuarios deberían entender que el precio sea mayor. Cuando no lo entienden y te escriben, como me pasó a mi, para que bajes el precio, se arriesgan a una discontinuidad del servicio o la aplicación que están usando.
Todo esto viene a que, lo crean los usuarios o no, la gente que está detrás de los servicios y de las aplicaciones también son personas con unas facturas que pagar. Los usuarios deberían ser conscientes del «coste de oportunidad» (ese dinero que pierdes por estar haciendo una cosa y no otra). Cuando un servicio cierra porque ese coste de oportunidad supera a los beneficios (y te buscas otro trabajo) debido a que la gente no quiere pagar aquello, no deberían sorprenderse del cierre.
Pero lo que me parece más sangrante es que, personas que disfrutan de un servicio que les es enormemente beneficioso (por ejemplo las búsquedas en Google), se rasguen las vestiduras cuando ese servicio intenta hacer dinero de alguna forma para la que (probablemente) tu les hayas dado permiso haciendo click en «I Agree» cuando te presentan los términos de uso. Yo siempre invito a todas estas personas a que no usen esos servicios y que se vuelvan a los métodos tradicionales (las bibliotecas siguen ahí para consultar).
Quizá ayudaría a la gente saber que a las compañias como Amazon, Google, Netflix, etc. no les importa en absoluto que tu seas pepito o juanito y tus circunstancias concretas. La verdad es que para ellos somo un número más en una matriz enooorme que sirve para encajarnos en un grupo de personas con preferencias similares a las que venderles algo.
penjuto dice
Buenas Emilio.
Sobre la publicidad en medios es un tema complejo. Yo desde hace muchos años utilizo extensiones de bloqueo de publicidad y de cookies de seguimiento por el hartazgo de muchas webs que saturaron visualmente sus contenidos con banners.
En cuanto a los podcasts, sigo bastantes podcasts americanos y cuando escuchas la información del patrocinador te la tomas como tal, como un anuncio y no como una recomendación real de un producto que vende el podcaster de manera convencida. Con los blogs y los posts patrocinados pasa lo mismo. Por esto, me compré el altavoz xiaomi que recomendaste y no se si lo haría en caso de que fuese un «anuncio».
Espero que mi comentario te sirva como muestra.
Un abrazo.