Hoy no hay miscelánea. Hoy me toca contaros cómo y por qué he tomado una decisión tremendamente difícil: dejar mi coro.
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Cierra el atril, cierra focus, cierra la cadena… pero como cierres el Daily o el Proyecto Machintosh voy y te busco. Me da igual si lo haces con el beibi detrás llorando, o la jefa recriminándote que estás con tus amigotes, me da igual oír tus bostezos… 😛
Bueno, ahora en serio. Siento mucho esa decisión, y yo esperaba que hubieras decidido recortar en otro lado, pero como dice el refrán, el pollo es mío y me lo fo… como quiero…
Nada, tío, cada uno sabe lo que se lleva entre manos (y tu también, ya vas anticipando las noches de dormir media hora y cosas así, XDDD).
Es una pena pero a la vez una evolución en tu vida. No puedes con todo (yo no podría ni con la mitad de lo que haces, y eso que no tengo niños) y creo que es una decisión acertada. Tus proyectos y tu realización como persona son muy importantes, son importantes en cualquier persona, pero tu familia está por encima. Ya verás como lo retomas cuando tus peques crezcan y sean más independientes.
Siempre he tenido las ganas de ir a ver uno de tus conciertos, y viendo que mañana es el último (por ahora) puede que nos animemos mi señora y yo y así de paso prbamos a ver si llegamos con el Leaf 😉
Mucha suerte mañana, y disfruta el concierto.