Lo que las víctimas de una desgracia como el reciente terremoto de Turquía y Siria necesitan y lo que nosotros debemos enviar son cosas distintas. Ellas necesitan comida, ropa de abrigo, medicamentos, etc. Lo que nosotros debemos enviar es solo una cosa: dinero. Pagando impuestos para que Cooperación Española envíe ayuda o con donaciones de nuestro propio pecunio. Pero no mantas ni botes de leche en polvo: di-ne-ro.