Un ataque terrorista de Hamas desde la Franja de Gaza hacia los territorios ocupados por el estado colonial de Israel, ha provocado que todas las personas volvamos nuestra mirada hacia ese campo de concentración con dos millones de personas retenidas, que es la franja (zanja mortuoria más bien).
Violencia, una tras otra, da igual el orden. Desesperanza, con la ultraderecha gobernando el estado sionista de Israel y falta de elecciones libres en el Estado Palestino, por miedo a que Hamas se haga con el poder simbólico y no solo con el poder real en todo el territorio palestino no ocupado.