«Eggtown» es el cuarto episodio de la cuarta temporada de Lost, 76 de toda la serie y fue transmitido el 21 de febrero de 2008. La necesidad de Kate de conseguir información del rehén podría poner en peligro su estancia con Locke, y también con Sawyer.
En la isla, Locke, con su usual talento para la hospitalidad, prepara un desayuno de huevos para Ben, su prisionero favorito, pero al final decide que la pared del sótano se los merece más. Porque, claro, cuando estás perdido en una isla sin recursos, desperdiciar un desayuno parece un movimiento lógico.
Kate intenta recuperar su estatus como el personaje más complicado de la serie al conspirar con Miles para interrogar a Ben, engañando a Hurley y metiéndose en líos con Locke, quien demuestra que es el dictador que nadie pidió, pero que todos tienen.
Mientras tanto, en el flash-forward, descubrimos que la justicia en el universo de Lost tiene menos sentido que los viajes en el tiempo de Desmond. Kate enfrenta su juicio por una lista interminable de crímenes. En el juicio, Jack aparece para defenderla, mintiendo descaradamente sobre lo buena que es, hasta que le preguntan si la ama. Su respuesta: «No. Ya no». Pos vale. Al final del episodio, Kate regresa a casa, donde descubrimos que está criando a Aaron, el hijo de Claire, Omaigod.