Pedro María Sánchez Amado

Existen personas que siempre ubican la responsabilidad, diría más, la culpa de todo lo que les pasa, en los demás: Su esposa, el colegio de su hijo o la directora del colegio de su hijo. O del tutor o de los amigos. O la culpa del hijo por lo que a él o a ella le pasa. Se denomina proyección y está relacionado con la falta de autoestima y de capacidad de gestionar las emociones negativas. Pero ¿y cuando el sistema nos intenta culpar de todo?

Tantas veces vengo aquí a contarte algo que creo que puede serte útil a ti, por ejemplo para tu economía, que hoy no es extraño que acuda a recomendarte que hagas algo por el resto de los seres humanos. Todo empezó con un vídeo corto que me hizo llegar mi vecina Ali, creadora de contenidos bajo el seudónimo de AliBlueBox, que se pasa de vez en cuando por aquí a conversar los viernes. Era una madre de una criatura con leucemia pidiendo un gesto sencillo y lleno de humanidad: hacerse donante de médula. Nunca fue más sencillo que ahora. Vamos con ello. Tienes más información en la zona de donantes de la web de la Fundación Carreras.

No es lo mismo comisión que suscripción. Lo primero nos parece algo malo y estamos hartos de ellas en la banca tradicional. Afectan más a las personas con rentas más bajas y nos cuesta ver qué nos ofrecen a cambio. Pero si le llamas suscripción, ofreces sacar dinero en cualquier cajero, dentro o fuera de España, entregas una preciosa tarjeta metálica y remuneras el dinero al 4%, duele menos e incluso seduce. Fuísteis muchos los que me preguntasteis de dónde saca el dinero n26 para ofrecer su cuenta estándar gratuita, remunerando al 2,26% su cuenta ahorro. Ahora ya sabemos cómo lo hacen. Y puede ser bueno para ti si cumples el perfil.

En España operan un par de redes, con formato de empresa unipersonal, CBC y Reparahome, que abusan de los precios a lo bestia, en aperturas de cerraduras. El modus operandi aprovecha espacios grises de alegalidad para pedir de 1000 a 3000 euros por servicios que los gremios de cerrajeros cifran en unos 70 a 120 euros. Usan Google para anunciarse o posicionarse con webs simuladas y te «atracan» ganzúa en mano.

Las cosas de un buen informático: reiniciar y reiniciar hasta que la cosa funciona. Con Santiago Pascual.