Un miembro de la Comunidad de Bala Extra en Telegram comentó las características de la tarjeta WeZink Me y me he lanzado a probarla. Porque no solo podemos obtener réditos de nuestro dinero con el ahorro. También con el gasto.
El edificio «Flatiron» se subasta en NYC
Uno de los edificios emblemáticos de Manhattan se ha subastado. Oficialmente «Edificio Fuller» y conocido en todo el globo como «Flatiron» por su forma de pico de plancha donde confluyen la Quinta Avenida de Nueva York y la calle Broadway. Una tercera juventud para esta preciosa obra de arquitectura.
Lidl finaliza la pandemia
El viernes pasado fui al Lidl que me pilla justo en la rotonda donde abandono la carretera Bilbao- San Sebastian, bueno la N634, que es más larga y recorre todo el norte de España. Fui a pasar el código QR para los descuentos y para el pago con Lidl Pay de la compra y me di cuenta de que ya no había ventanita por donde meter con torpeza mi iPhone. De hecho ya no había metacrilato que separara al cajero de mi. Si en febrero fue primavera en El Corte Inglés, ya no hay pandemia en Lidl. Algo muy simbólico, viniendo de una tienda tan popular.
El autismo de Fede
Fede Andrade, amigo, oyente de años y colaborador de Bala Extra, aprovecha la celebración en poco más de una semana, el dos de abril, del Día Internacional del Autismo, para compartir con nosotros su diagnóstico tardío de la condición de espectro autista y explicarnos sus vivencias y lo que significa vivir como persona autista, así como lo que podemos hacer los «neurotípicos» (si es que verdaderamente lo somos) cuando nos relacionamos con personas autistas.
Se nos va de las manos
Hay que buscar en la acción de gobierno, de este y de los que vengan después, los motivos para la crítica como oposición. La oposición de tierra quemada, de «España se rompe» o «se desmorona», recuerda a esos titulares de «clickbait», que nunca son lo que parecen, pero en los que caemos una y otra vez. Nuestro País necesita un pacto sobre esto. De lo contrario, acabaremos con él sin necesidad de filoetarras ni secesionismos. Nosotros solos nos bastaremos.
Yugoslavia
Es la historia de un amor. Por una nación que no es la mía. Un país de naciones que visité unos meses antes de su guerra de secesión, la Guerra de los Balcanes. Especialmente cruel, lloré mucho aquellos años. Los lugares: Dubrovnick, Sarajevo o Mostar. Las personas: Srebrenica. Un paraíso de los servicios sociales, sin demasiada libertad, pero con buena convivencia, que estalló por los aires como un taponcito de nitroglicerina.