Presentarse a una oposición es de las cosas más duras a las que se puede enfrentar un/a maestro/a. A través de unos exámenes te juegas tu futuro y, si consigues llegar a la defensa oral, tienes que demostrar que eres capaz de llevar un aula y de enfrentarte a una clase.
Pero, ¿qué pasa si me pongo tan nervioso/a que no puedo hablar? ¿cómo puedo controlar los nervios? ¿cómo puedo hacer para que se me entienda?…Don’t worry! En este capítulo 27 os dejo algunos consejillos para que el exámen oral no se os resista.
¡Suerte valientes!