Desgraciadamente, por segunda vez este año, hablo de alguien que hemos perdido. Este capítulo va dedicado a Margarita Salas, alguien a quien no deberíamos olvidar por su tenacidad, su insistencia, y por haber descubierto a nuestra España que los fagos son muy importantes. Para recordarla hago un repaso de algunos de los momentos que compartí con ella, y para evitar malentendidos también aclaro algunas cosas que se han dicho y no son así. Espero que con el tiempo siga recibiendo todo el reconocimiento que se merece y nunca la olvidemos.