Un miércoles de ceniza como hoy de hace 49 años, la Policía Armada, a las órdenes de Manuel Fraga Iribarne, entonces ministro de gobernación en el último gobierno franquista, con el dictador ya muerto y comenzado el reinado de Juan Carlos I de Borbón, obligó a salir a los trabajadores reunidos en asamblea en la iglesia del vitoriano barrio de Zaramaga. Y allí apalearon a los que salían por los lados y dispararon a matar a los que salían por la puerta principal. Decenas de heridos de bala y varios muertos.
Los sucesos del 3 de marzo de 1976 de Vitoria. Así se llaman. Solo son una muestra de las cientos de muertes a manos de los excesos policiales y de los grupúsculos ultraderechistas afines al régimen franquista, que salpicaron toda la Transición y toda España y de los que (casi) nadie habla.