Órbita grana

Y en esta entrega narramos el final de una temporada que quedará marcada por ser una de las peores jamás vividas por nuestro Real Murcia. Una temporada en la que consumamos un descenso a la cuarta categoría del fútbol nacional y el Real Murcia, de nuevo, ve tambalear sus cimientos.

Declaraciones de los jugadores de la actual plantilla grana indican que van a ser «profesionales» para afrontar el final de temporada. Un final de temporada que ha venido a confirmar lo que ya sabíamos, y es que el año que viene competiremos en una categoría más abajo. Una victoria intrascendente ante el filial del Cádiz en el que se falló, de nuevo, un penalti.

Debo reconocer que no sabía que nombre ponerle a esta entrega 87 de Órbita Grana. Es difícil ofreceros un podcast con malas noticias jornada tras jornada. También reconozco que me gusta poder seguir ofreciéndoos una entrega cada semana: es un privilegio poder seguir a nuestro club. Un histórico Real Murcia que cuando hace bien las cosas nos llena el alma y nos hace felices. No estamos viviendo buenos tiempos. Un día esto cambiará y ese día no me costará nada ponerle nombre a las entregas de este humilde podcast. Hasta entonces, seguiremos al lado de nuestro club. Hasta el final, VAMOS REAL.

El centenario Real Murcia, el club más representativo y más querido de la séptima ciudad más grande del país ha perdido contra el Tamaraceite. Unos jugadores que portan un escudo que pesa cien toneladas más que su calidad han arrastrado nuestro nombre por un campo de fútbol inédito en la historia del Real Murcia.

El Real Murcia consigue una victoria al final del partido que nos enfrentaba al filial del Cádiz. Pese a que roza lo imposible, los números no hacen matemáticamente imposible la posibilidad de que la temporada que viene podamos competir en Primera RFEF, pero como indico, muchas cosas deben pasar para que esto llegue a buen fin. Por otro lado, reflexionaremos sobre futuro de este fútbol que sus dirigentes están ejecutando en el que cada día menos gente joven se ve interesada por él.

Como bien reza nuestro himno, «si el camino se hace duro, saboreas la victoria». La salvedad es que la victoria no está ni se le espera. Unos jugadores incapacitados para el ejercicio del deporte rey, dirigidos por un entrenador que no ve la importancia que tienen los encuentros y comandados por un director deportivo incapaz de diseñar un equipo capaz de dar dos pases. Situación caótica en nuestro club que ha mermado a la inquebrantable afición grana y que ve el hundimiento del club de sus amores.